Los Ocotones, Renovando para el futuro en Chiapas

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Conservación
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Preservar y conservar las especies de plantas que se encuentran bajo algún estatus de conservación con énfasis de bosques templados y húmedos tropicales de Chiapas.

Difundir la enseñanza y conocimientos botánicos en especial de las zonas templadas y tropicales.

México se considera un país altamente diverso con cerca de 22, 800 especies vegetales según Rzedowski (1991). Sin embargo, a situación que realmente afronta es la destrucción acelerada de los ecosistemas naturales que contienen esta diversidad. En vista de la destrucción de sus selvas y bosques a una tasa de 500, 000 hectáreas al año es urgente una de las estrategias que ha nivel nacional se ha propuesto ha sido la creación de reservas biológicas funcionales para a conservación in situ (Linares, 1997).

Otra de las alternativas de conservación que se ha propuesto ha sido la conservación ex situ a través del establecimiento de Jardines botánicos. Los jardines botánicos son pequeñas extensiones de entre 5 y 50 hectáreas, protegidas de las perturbaciones externas y destinadas a la preservación y conservación de diversas especies de plantas, principalmente de aquellas que se encuentran en peligro de extinción Desde los años 40’s hasta los 90’s se han establecido más de 30 jardines botánicos en el país (Gómez-García, 1999; Vovides, 1998) y ha podio responder a algunos problemas de conservación como el caso de cactáceas y cycadas sobre todo cuando se involucra a los campesinos en el establecimiento de viveros in situ con cursos capacitación sobre la propagación y cultivo de estas plantas (Vovides et al, 2002; 2007; Hernández & Gómez-Hinojosa, 2002).

En estos jardines se mantiene una colección de pantas bajo un sistema científico de seguimiento. Las plantas se registran a su llegada, anotándose los datos de procedencia, hábitat, tipo de suelo, ecosistema, clima y si es posible utilidad; esto con el objeto de asegurar el éxito de la aclimatación y de la plantación de las especies. Además se lleva la historia de la vida de cada individuo de las especies incluidas en la colección, para saber cuándo florecen, cuando fructifican y bajo que condiciones. Los jardines botánicos pueden intervenir en casi todas las tareas que componen una estrategia integrada de conservación y deben considerarse como actores principales dentro de este proceso, en estrecha colaboración con otras agencias tanto nacionales como internacionales (Heywood, 1992; Vovides y Linares-Mazan, 2000).

Una de las tendencias de los jardines de hoy en día es crear colecciones que documenten la interacción entre las plantas y el hombre. Otra tendencia es vincularse en la comunidad en donde están enclavados, destinándose áreas en donde la misma comunidad pueda trabajar Los jardines botánicos tienen el potencial para ser los centros de asesoría y entrenamiento de las autoridades, tanto en materia de comercio de especies amenazadas como en su uso sustentable. Además de la investigación científica, ofrecen amplios programas de educación en todos los niveles que incluyen cursos, talleres, visitas guiadas, conferencia, entre otras actividades (Vovides, 1997).

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